miércoles

Cuando te conviertas

no quiero que hables reina valera nueve sesenta. 

no quiero que tomes todo por sentado.

no quiero que te dejen de asombrar. ni las brutalidades de la biblia, ni la genialidad de Jesús, ni las macanadas de sus seguidores.

no quiero que creas en Dios porque la biblia dice que, sino que creas en el Mesías por el encuentro personal que tuviste con él.

quiero que cuestiones. que te importen las personas fuera de nuestros cuatro muros y nos recuerdes como no actuar.

que me preguntes por el significado de las palabras como hallelujah, hossanah, y me hagas pensar.

me gustaría escuchar canciones nuevas tuyas en la congregación de los santos (así de celestial nos llamamos, sabes?) quiero que con tu guitarra en brazo le digas a Dios en tu forma, que te gusta de él.

no quiero que te comportes en la iglesia. ni que aprendas modales. ni el protocolo.

quiero que seas espontanea, te rías a carcajadas, te vistas con los colores que te gustan y te sientas libre de bailar.

yo no quiero que tu cascarita cambie, ya existen muchos con mascaritas. yo quiero sí, ver al Dios viviente y al agua viva fluyendo de tu interior. eso va a modificar algunas cosas, pero espero que sea Él, y no la idiosincrasia eclesial.

aún así que aprendas a amarnos, tolerarnos, tenernos paciencia, a nosotros, los que creamos formas en la que nos sentimos cómodos y seguros, y que con humildad y tu ejemplo nos edifiques (y ahí como sorpresita iba otra palabra de las nuestras).

porque en realidad, yo no quiero que dejes de ser vos, deseo que te libres de lo que te impide serlo hoy.

1 comentario:

  1. Esto es hermoso... Me encantaría saber a quién va dedicado? Aunque ha de ser imposible saberlo o sino se revelaría tu seudónimo...

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