El señor del Blog

Capitulo II

La Partida

A la mañana siguiente de la noche nocturna del jurado juramento ante la flamante flama, los 7 héroes partieron. Dirigiéndose primero al Norte, luego al  Oeste, al Sur y, por último, al Este; sin poder dirigirse a su objetivo, decidieron preguntar a un aldeano que descansaba bajo un árbol, que camino debían tomar, para llegar a la salida de la comarca estatal nacional regional.

Una vez atravesadas las puertas de la comarca estatal nacional regional, emprendieron su misión, caminando caminos, cabalgando caballos y navegando naves, cada vez más tormentosos y  peligrosos. Era evidente que estos héroes se acercaban cada vez más al ser obstinado, quien resguardaba el Blog de las leyendas. 

            Una noche, tan oscura, pero tan oscura, que el sol ya no brillaba, estos héroes se enfrentaron en un enfrentamiento frontal frente a la frontera fronteriza Franco-Franca, que se encontraba frente a ellos. Encararon de cara a las legiones cuadrangulares de Nemo Misons quien resguardaban la entrada del puente Sok’erfort, para llegar al otro lado. Esta larga batalla, fue tan sangrienta que todos sangraron sangre roja, tan roja, como la misma sangre.

            Cinco días y siete noches después, la batalla culmino con el final, llevando a nuestros héroes a la Victoria, una pequeña aldea que estaba cruzando el puente Sok’erfort, como prisioneros de Nemo Misons. Pero todo estaba fríamente calculado, puesto que en aquellos días, las temperaturas iban por debajo del cero.

            Prisioneros en las oscuras prisiones de Nemo Misons, nuestros héroes conocieron a una extraña criatura, su “belleza” destruía espejos y su calva cegaba a todo aquel que se atreviese a mirarla, ya sea de día o de noche. Aquella criatura se llama Lrak Onihc de las islas de Nopaj. La razón de que se encontrase lejos de sus tierras era un misterio desconocido, ni él mismo podía recordarlo.

            Los héroes recordaron viejas leyendas donde hablaban de los Ponjas, la raza de Lark, que decían que ellos poseían la clave para descifrar la entrada del blog. Las leyendas contaban que si estos seres, en un determinado lugar y a una hora determinada, podían mostrar la entrada. Nadie sabía cómo funcionaba, ni los mismos Ponjas, pero  confiaban en que lo sabrían, en el momento adecuado.

            Las antiguas leyendas dejaban un indicio, un verso, un acertijo que se heredaba de generación en generación en generación en generación en generación. El cual decía lo siguiente:

“Al momento en que el sol se oculte durante el día, y surja su primer rayo donde el Rey nace, la estrella caída revelara la entrada”