martes

Pequeña historia de amor (Parte II)

Capítulo 2

Mi novia era alguien solidaria, y le encantaba ayudar a los demás en todo momento. Las puertas de su casa se encontraban siempre abiertas, no había nadie que no fuera bienvenido, había niños, jóvenes y ancianos. Su amor por ellos era inmensurable.

Ya que su casa era un poquito vieja, y quedaba cada vez más pequeña, decidí construirle una casa más bella y con más espacio. El día de la sorpresa llegó, ella venía con los ojos vendados, adornada con su sonrisa coqueta que era igual al del primer día en que nos conocimos. Destapé sus ojos en frente de la casa, y ella quedó sumamente asombrada, estaba tan feliz y agradecida.

La casa no era muy increíble, pero era algo en lo que mi padre y yo pusimos todo nuestro esfuerzo en ello, no obstante era muy bonita. Sin embargo con el pasar de los años la casa fue deteriorándose, porque la gente que residía en ella no sabía cuidarla, por eso me puse un poco triste y yo sabía que ella también lo estaba pero no quería decírmelo. Le pregunté a mi padre si es que ella podía venir con nosotros a nuestro pueblo y sin problemas me dijo que sí podía venir.

Entusiasmado fui a decírselo, pero me dijo que no podía ir conmigo, porque le había hecho una promesa a su pueblo de que los ayudaría hasta que ellos puedan salir de la crisis en la que estaban viviendo. Le pregunté cuanto tiempo se quedaría a ayudar, me dijo que todavía no lo sabía, pero que dentro de no mucho tiempo sería.
Nosotros estando a punto de terminar las construcciones en el pueblo me dijo mi padre que ya era tiempo de volver a nuestro pueblo. Fui corriendo junto a ella para preguntarle si estaba lista, pero ella me dijo que todavía no lo estaba.

Tristes por la melancolía nos prometimos que nos volveríamos a ver y como garantía de nuestro próximo encuentro le deje a mi fiel y amado compañero para que la cuide, defienda y ayude, mi querido perrito.

Y esa es mi historia que cuento a cada persona que a muchos les cuesta creer que un hombre fuera capaz de esperar tanto tiempo por un amor que hace tanto no ve. Pero no se imaginan que  con ansias me pregunto cada día cuando será el momento en que mi padre me dirá que estamos listos para vernos en el altar.

1 comentario:

  1. Anónimo0:21

    linda historia.....trama interesante ...intrigante.....me gusto leer....sigue produciendo....felicidades....

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