domingo

El pasar de la noche

En medio de la noche ella estaba allí, en un bosque de confusión y en una telaraña de engaños y mentiras. Paseándose por las nubes, su amado la miró. Llevado por la pasión de su amor no resistió en ver así a su hermosa. Su corazón lo llevó a dejar todo por ella y así iniciar el viaje en rescate de su amada.
Bajo por medio de las constelaciones a buscarla y al verla, la encontró pálida y fría. Ella ya no le reconocía, se había olvidado de él, el velo que llevaba puesto no la dejaba ver al novio. Cegada por los atavíos de sus nuevos amores, lo negó en frente de él, diciendo que no lo conocía y que no le amaba.
Aun con lágrimas en sus ojos el caballero no se rindió, mas bien se dispuso a cumplir esa promesa que le había hecho a ella en su juventud, la promesa de que su amor por ella nunca se extinguiría y de que si fuese necesario daría su vida para tener ese corazón en el tesoro de su alma.
Así que se entregó para morir por medio de los amantes encelados de la joven. Creyendo ellos que matándole apagarían por completo la llama del alma de la novia, lo tomaron, lo escarnecieron hasta que su rostro ya no tenía forma alguna.
Muerto él, celebraron los amantes creyendo que obtuvieron victoria, pero la verdad era que aun muerto el hombre alcanzó el triunfo, porque siempre que el hombre muere para conquistar a su deseada logra arrebatarla el corazón.
La muerte no pudo tenderlo bajo una tumba, sino que por la fuerza de su amor, resucitó para buscar a su amada. Al verla esta vez sí le reconoció, pues había cumplido su palabra y con una estrella fugaz le cumplió el deseo de volver a sentir vida. Entonces al darle vida, se unió ella a él como miembro de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.

Escondiéndose la luna en su atrio, terminó así el pasar de la obscura noche para dar lugar al día, que desde entonces reinaría eternamente. 

1 comentario:

  1. En verdad, qué bonita analogía! =) Además, es lindo ver que tu destreza escribiendo va mejorando con cada post.

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